El CARNAVAL es una celebración pública que tiene lugar inmediatamente antes de la Cuaresma cristiana ( tiempo para arrepentirse de los pecados cometidos y de cambiar algo de cada uno para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo), con fecha variable (desde finales de enero hasta principios de marzo según el año), y que combina algunos elementos como fiestas, desfiles y disfraces en la calle. Por extensión se llaman así algunas fiestas similares en cualquier época del año. A pesar de las grandes diferencias que su celebración presenta en el mundo, su característica común es la de ser un período de permisividad y cierto descontrol.
El denominador común de todos los CARNAVALES que en el mundo se celebraban, era la limpieza general y a fondo. Era la ocasión en que se revolvían todos los armarios y todos los rincones de la casa y se encontraba cada uno con su pasado.
Cuando los CARNAVALES no se habían comercializado aún y convertido en espectáculo, lo que se hacía era disfrazarse con las ropas viejas propias o ajenas que uno encontraba en los baúles cuando emprendía la gran limpieza anual de la casa marcada por la cuaresma (para los romanos el mes de febrero es el de la limpieza; y los musulmanes también empiezan su Ramadán con la limpieza general).
Hoy nos podemos dedicar a los lujos y esplendores del CARNAVAL, porque el gran problema de la higiene que pasaba cuentas cada pocos decenios diezmando la población está superado.
Era obligado una vez al año, antes de la primavera, sacar todos los trastos viejos de casa, rellenar los desconchados de las paredes, encalarlas por dentro y por fuera y dejarlo todo reluciente para cuando los dioses pasasen la solemne inspección en sus carrozas navales sobre las que danzaban los fieles en su presencia.
Por eso en unos CARNAVALES las escobas y los barridos era grandes protagonistas, y era un honor y señal de buen augurio tener la escoba como pareja del baile.
En otros CARNAVALES se daba salida a la rivalidad entre vecinos tirándose a la cabeza unos a otros los trastos que salían de la limpieza de las casas. Esas rivalidades se han reconducido hacia la chirigota, los concursos y las grandes competiciones de cuadrillas, peñas y escuelas de samba.
En todos los CARNAVALES la gente se disfrazaba poniéndose atuendos no habituales y se aprovechaba para vivir unos días en unos hábitos que no eran los propios y con unas caretas que se supone permitía no ser reconocido por nadie.
En la actualidad la fiesta del carnaval se celebra en los 3 o 4 días anteriores al miércoles de ceniza que da inicio a la Cuaresma cristiana. Estas fiestas preceden a un supuesto tiempo de recogimiento y ayunos.
En nuestros tiempos, las fiestas de carnaval se han separado completamente de cualquier sentido religioso, a pesar de continuar celebrándose antes de la cuaresma. Aunque hay algunos lugares en los que se celebra al terminar la Epifanía el día 6 de enero. O en otros lugares como Alemania comienzan el día 11 a las 11 y 11 minutos.
Hay países como Brasil en los que el carnaval es el espectáculo del año, y en los que la preparación de la fiesta y la duración de la misma se alargan durante más de un fin de semana.
Lugares donde el carnaval es famosos y atrae a un público interesado en conocer la forma en que se celebra y disfrutar de días con las costumbres de la ciudad hoy en día, podrían ser: el Carnaval de Río, el de Santa Cruz de Tenerife, el de Venecia, o también es muy típico dentro de nuestro país el carnaval de Cádiz, alejado de la pomposidad de otros como los de las islas pero con el encanto de lo sencillo y la imaginación de los participantes. Sin olvidar por supuesto a las Chirigotas que siempre retratan con ironía y mucho humor los temas de actualidad durante el último año, en las letras de sus composiciones.
¡Que disfrutemos todos en estos carnavales ! ! !
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